La provincia de Castellón ha vivido los meses de junio y julio más frescos de la última década. Así lo señaló ayer a Mediterráneo el catedrático de Climatología de la Universitat Jaume I, José Quereda, quien expresó su sorpresa, por lo que está sucediendo en los primeros 10 años del siglo XXI, coyuntura que calificó de anomalía climatológica.Concretamente, las temperaturas han caído en el litoral castellonense un grado y medio con respecto al año 2010, hasta situarse en los 21,7 grados de media. Asimismo, las mínimas han bajado hasta los 20 grados y las máximas no han superado los 30. Ahora bien, hay que tener en cuenta que en las localidades del interior de Castellón las temperaturas serán inferiores. De hecho, Castellfort registró la madrugada de ayer las mínimas más bajas de toda la Comunitat, con 12 grados.
A esta tendencia de refrescamiento,tenemos que sumar también los cambios anómalos por lo que a las lluvias se refiere.Los valores de precipitación han aumentado el doble los dos primeros meses de verano si lo comparamos con los de años anteriores, apuntó Quereda, que concretó que normalmente en esta época caen 25 litros por metro cuadrado y en 2011 se han alcanzado los 50 litros. Una variación climatológica que, tal y como precisó Quereda,está siendo más acusada desde el 2003.
PREDICCIÓN // Respecto a los próximos días, el catedrático de la UJI explicó “que habrá vientos flojos de fuerza débil, nubosidad variable y las temperaturas mantendrán la misma tendenciaâ€. Según la Agencia Estatal de Meteorología, el día de la semana que registrará valores más bajos será el domingo, cuando en la capital de la Plana habrá 19 grados de mínima y 27 de máxima. Por lo que a la jornada de hoy se refiere, será la más calurosa de la semana, con 30 grados de máxima. No obstante, como confirmó Quereda, “la inestabilidad no generará ninguna precipitación.
Fuente: El periodico Mediterraneo
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